Más de 60 docentes y facilitadores de Colombia fueron formados en Inteligencia Artificial
Si bien es cierto que el término Inteligencia Artificial -IA- se ha popularizado en los últimos meses, su desarrollo lleva varias décadas, tanto así que hoy es posible tener a un clic de distancia herramientas con funciones avanzadas que incluyen desde la capacidad de ver, comprender y traducir lenguaje hablado y escrito, hasta analizar datos, identificar plagios, hacer recomendaciones y mucho más.
Este campo de las ciencias de la computación es de interés para profesionales de diferentes áreas del conocimiento, quienes ven en la IA un aliado para la ejecución eficaz, innovadora y sostenible de sus labores, ejemplo de ello, son los 60 inscritos al Curso gratuito ofertado a través del programa Poeta DigiSpark a facilitadores y maestros de Colombia; un proceso formativo liderado por Microempresas de Colombia gracias al trabajo conjunto con Microsoft, The Trust For The Americas, y la Organización de los Estados Americanos -OEA.
De acuerdo con Leoman Vargas, docente del programa Poeta DigiSpark, en este curso participaron desde ingenieros informáticos e industriales hasta administradores de empresas, licenciados en pedagogía, docentes de todas las áreas, filósofos y matemáticos, quienes de manera sincrónica y asincrónica tuvieron un acercamiento a la IA desde lo epistemológico, lo conceptual, lo ético y lo práctico.
Durante las 12 horas que duró este proceso formativo, los participantes pudieron identificar y conocer algunas herramientas y aplicaciones, entre ellas, ChatGPT, ChatPDF, Poe, Miro, Gamma App, ZeroGPT, Copyleaks y Duplichecker.
“El curso estaba dirigido a facilitadores y docentes, lo que favoreció la amplia participación de profesionales de diversas disciplinas, quienes se mostraron interesados en desmitificar las creencias frente a la IA para entender su funcionamiento y su inclusión en las aulas de clases”, dijo Leoman Vargas, quien fue reiterativo en manifestar que el uso correcto de la IA requiere de habilidades técnicas y blandas que se adquieren a través de la alfabetización digital, pero también durante la formación básica como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, la lógica y la comprensión lectora.
Para Gabriel Jaime Castaño Uribe, docente y participante del curso, dos fueron las razones que lo motivaron a inscribirse: “el auge y el impacto qué está teniendo la IA en los diferentes ámbitos, especialmente en la educación”, quien calificó este proceso como un “gran curso que logró vincular la parte epistemológica, histórica y práctica” que tiene aspectos por mejorar, entre ellos, “la gestión del tiempo, es necesario priorizar aspectos o ampliar su duración porque 12 horas son poco para el mundo de la IA”.
Por su parte, Walter Salazar, asesor y facilitador empresarial, señaló que decidió participar en el curso porque tenía “un gran interés en identificar, conocer y manejar herramientas que me permitieran acompañar procesos de emprendimiento y fortalecer habilidades para la vida en diferentes públicos”.